El Derecho Concursal es la rama del Derecho mercantil que tiene por objeto la regulación del concurso de acreedores, que es el procedimiento que se inicia cuando una persona, ya sea física o jurídica, no puede hacer frente a sus deudas, encontrándose en una situación de insolvencia presente o  previsiblemente futura. 

El Derecho Concursal es la rama del derecho que se encarga de ofrecer distintas soluciones en estas situaciones de insolvencia. La intención siempre será que el deudor y sus acreedores encuentren un acuerdo que satisfaga los intereses de ambas partes y, si no fuera posible, se establezca el mecanismo de liquidación de esa empresa o del activo del que posea esa persona física, a fin de con ello hacer frente a las deudas que mantiene con sus acreedores.

Este mecanismo tiene como objetivo que el perjuicio al acreedor sea el mínimo, pero sobre la base de posibilitar que el deudor sea capaz de reestructurar su situación económica y dar continuidad a su actividad, pues es la manera de poder garantizar la seguridad financiera.

Actualmente el concurso de acreedores es el mecanismo que está posibilitando, por un lado que aquellos acreedores que llevan años intentando cobrar sus deudas, con innumerables litigios interpuestos infructuosos, puedan cobrar parte (o si hay suerte la totalidad) de sus deudas; y, a su vez, que esas empresas o personas físicas puedan volver al mercado laboral, a generar una actividad y saldar las cuentas pendientes.

Y recuerde: con la actual Ley Concursal es posible volver a empezar y conseguir la exoneración de esas deudas que lleva años arrastrando.